¿SIMULAMOS O DISIMULAMOS?
Publicado en: Equipos & Talento 2011 www.equiposytalento.com
Por Alberto Marín, Director General de CompanyGame.
Las organizaciones necesitan prepararse para adaptar la
toma de decisiones a los cambios del entorno
Que las reglas de juego en el mercado y los diferentes sectores
están cambiando, es algo que ya no duda nadie. A pesar de eso,
¿consiguen los empresarios, directivos y mandos modificar su
patrón de toma de decisiones o siguen actuando de la misma
forma?. La realidad es que nos resistimos a cambiar hasta que el
escenario o las circunstancias nos fuerzan a ello. Este
comportamiento es una demostración de la naturaleza de nuestro
pensamiento y de las dificultades que tiene nuestro cerebro para
visionar el futuro, pero también puede atribuirse a falta de
previsión y a rutinas que intentan explicar el futuro a partir
del pasado. Como consecuencia, son muchos los momento en qué sin
darnos cuenta disimulamos, mostrándonos muy seguros de las
decisiones que adoptamos, aunque no sea más que una pose frente
a una situación de desconocimiento e incertidumbre.
Podemos seguir disimulando, y afirmar que las cosas pasan porque
el escenario es el que es o podemos pensar que las nuevas
circunstancias pueden ser una oportunidad excepcional para
mejorar la posición competitiva de la empresa. La cuestión es
que para poder aprovechar las oportunidades hay que acertar en
la interpretación del entorno y del mercado, de las nuevas
reglas de juego, de las alternativas de actuación. Al mismo
tiempo, los sistemas de información de las empresas deben
evolucionar, la visión estratégica y global de negocio por parte
de los directivos debe reforzarse, y el desarrollo de la
capacidad de definir escenarios y de planificar el negocio en
cada uno de ellos debe constituir un quehacer diario en las
empresas.
Los Simuladores de Gestión Empresarial: una herramienta para
practicar la toma de decisiones sin riesgo
La gestión simulada de empresas es una eficaz metodología para
impulsar el cambio en directivos y mandos experimentados, pero
también para desarrollar jóvenes profesionales. Los simuladores
pueden considerarse parte de lo que se conoce como “juegos
serios” –cuya eficacia formativa está ampliamente reconocida- y,
al contrario de lo que se puede pensar, la gestión simulada de
empresas no significa perdida de rigor, porque pretende ser
exigente, estimulante y ofrecer a los participantes la
posibilidad de crecer profesionalmente.
Gracias a Internet y a los avances en e-learning, es más fácil
acceder al uso de los simuladores de gestión por lo que el
número de empresas que los incorporan con éxito a sus programas
de formación crece. Además, la mayoría suelen estar dispuestas a
repetir la experiencia aunque haya sido necesario un esfuerzo
inicial de adaptación. Sin embargo, todavía existen barreras
para la aplicación efectiva de los simuladores de gestión en la
empresa siendo una de las principales la dificultad que suele
enfrentar la dirección de RRHH para motivar que la dirección
apoye la adopción de estas herramientas. Al respecto, resulta
clave mejorar el conocimiento de los simuladores, sus
funcionamiento, ventajas y potenciales aplicaciones en las
organizaciones.
Los Simuladores de Gestión: aprender haciendo
• Facilitan el aprendizaje por descubrimiento
• Involucran a los participantes
• Recrean situaciones reales de negocio
• Persiguen unos objetivos pero no hay una única solución
posible
• Manejan mucha información
• Fomentan el análisis y la toma de decisiones
• Se pueden aplicar en formato competitivo